Bienaventurado Tutanjató, divinidad del hado, par de Ra y Amón, compañero de glorias y autoritarios poderes, Melancólico y grato amaneció el día anoticiado con su muerte, Metamorfosis prístina que sufrió a jovial edad, Pasearas por los jardines incorpóreos repartiendo gloria, amor, sabiduría y eterna bondad, Magnánimo y justo, con su poderío, restauró el orden del Nilo y nos gobernó a siervos y a nobles clérigos por igual, Oro, lapislázuli , turquesa s, cornalinas, pasta vidrio, cuarzos, obsidianas, ornamentan fastamente vuestro funesto final, En un busto de sobria riqueza, Capituló su deidad párvula, sin distar la sapiencia, Es, ahora, arbitrario el destino, del porvenir del Egipto, el Bajo y el Alto Nilo lo besan en secreto, deseando su próxima y próspera transformación, Gigante ante los Dioses expectantes, anhelantes a su llegada, Arrodillado sobre mi shenti , plisado, arrugado, sucio, polvoriento, húmedo y terroso, evoco en mi memoria, las palabras que vociferó al pueblo, A los ni